Siglos de ensayos y error, de sistematizar experiencias y desarrollar nuevas técnicas y herramientas, han permitido al mundo del mecanizado especializarse a niveles que hoy grandes industrias dependen de la producción de piezas mecanizadas para seguir funcionando. En esta oportunidad vas a conocer qué es el proceso de bruñido y sus aplicaciones bajo la guía de nuestros expertos.
Contents
¿Qué es el bruñido?
El bruñido es un proceso de mecanizado que se utiliza para mejorar la precisión y el acabado de las superficies internas de los orificios. Consiste básicamente en poner a girar y mover una herramienta llamada mandril, que tiene unos extremos que actúan como una lija sobre la pieza que se está tratando.
Esta técnica de mecanizado sirve para eliminar las irregularidades, las marcas y las tensiones que se producen en los orificios por otros procesos como el taladrado, el escariado o el rectificado. El bruñido también sirve para crear un patrón de rayas cruzadas que favorece la lubricación y reduce el desgaste y la fricción.
Generalmente, se aplica en piezas que requieren una alta precisión y calidad, como los cilindros de los motores, las bielas, los engranajes, los instrumentos médicos o las joyas.
Bruñido de interiores y exteriores
Entre las técnicas de bruñido está el de interiores que se aplica a superficies de revolución huecas, como tubos, bujes o ejes. Este se realiza con una herramienta especial, llamada piedra o barreta abrasiva, que se abre y apoya sobre la superficie del agujero procediendo a la eliminación del material
El bruñido de interiores es muy utilizado en el acabado de cilindros para motores de combustión interna, bielas, diámetros interiores de engranajes, entre otros.
Por su parte, el bruñido de exteriores se aplica a superficies de revolución macizas, como barras, ejes o cilindros. Esta técnica se aplica con una herramienta similar a la del bruñido de interiores, pero en este caso el cabezal expansible se cierra y apoya sobre la superficie exterior de la pieza. La herramienta gira y se desplaza a lo largo del contorno de la pieza eliminando el material.
Aunque esta variación es menos común que el bruñido de interiores, es mucho más efectiva a la hora mejorar el acabado superficial y la precisión dimensional de piezas que requieren un alto grado de calidad.
Aplicaciones del bruñido
Esta técnica de mecanizado tiene varias aplicaciones en diferentes sectores industriales, vamos a compartir algunas con todos nuestros lectores:
Hidráulico
El bruñido se usa para mejorar la forma y el tamaño de los orificios de componentes hidráulicos, como bombas, válvulas y cilindros. También crea un patrón de rayas cruzadas que favorece la lubricación y reduce el desgaste y la fricción.
Energía
Otra industria que demanda sus servicios es la energía, donde se usa para mejorar la resistencia y la eficiencia de los componentes de producción de energía, como los de petróleo, gas, eólica y turbinas.
El bruñido también previene la oxidación y el sobrecalentamiento del metal.
Aviación
En la industria de la aviación se aplica para mejorar la precisión y la calidad de los componentes aeronáuticos, como los cilindros de los motores, las bielas, los pistones y las válvulas. El bruñido también mejora la seguridad y el rendimiento de los aviones.
Automoción
Cerramos este listado mencionando esta industria donde se usa para mejorar el funcionamiento y la durabilidad de los componentes del motor, como los cilindros, los pistones, los anillos y los cojinetes. El bruñido también reduce el consumo de combustible y las emisiones contaminantes.
Ventajas del bruñido
El bruñido es una técnica que tiene muchas ventajas sobre otros métodos de acabado como el rectificado o el lapeado. A continuación vamos a compartir con nuestros lectores algunas de ellas:
- El bruñido produce un acabado superficial muy liso y brillante, con una rugosidad que puede variar de 0,05 a 0,8 micras. Esta superficie tiene un trazado rayado helicoidal que favorece la lubricación y la transferencia de calor entre las piezas en contacto.
- Así mismo, esta técnica mejora la precisión dimensional y geométrica de la pieza, logrando tolerancias estrechas y formas cilíndricas, rectas y redondas. El bruñido puede corregir defectos como el ovalamiento, la conicidad o el alabeo que pueden producirse por técnicas de mecanizado previas.
- El bruñido también aumenta la resistencia al desgaste y la corrosión de la pieza, al eliminar las irregularidades, las grietas y las tensiones residuales que pueden actuar como focos de deterioro. Además, genera una capa superficial endurecida por la deformación plástica que produce el abrasivo, lo que incrementa la vida útil de la pieza.
- Para cerrar, podemos asegurar que el bruñido es un proceso rápido y eficiente, que puede arrancar hasta 0,4 mm de material en pocos segundos. Tiene un bajo coste operativo, ya que solo requiere una herramienta abrasiva y un fluido lubricante. Asimismo, el bruñido también es un proceso ecológico, ya que no genera polvo ni residuos peligrosos.
Estas son algunas de las ventajas del bruñido, que lo convierten en una técnica muy utilizada en la industria del mecanizado para el acabado de piezas cilíndricas.
Diferencias entre el bruñido y el rectificado interno
El bruñido y el rectificado interno son dos procesos de mecanizado que se utilizan para mejorar la precisión y el acabado de las superficies internas de los orificios. Sin embargo, tienen algunas diferencias que los hacen más adecuados para distintas aplicaciones, entre las que podemos destacar:
La herramienta
El bruñido utiliza una herramienta llamada mandril, que tiene unos abrasivos que actúan como una lija sobre el material de la pieza. El rectificado interno utiliza una herramienta llamada muela, que tiene unos granos abrasivos que cortan el material de la pieza.
El movimiento
Otra diferencia es que el bruñido hace girar y mover el mandril dentro del orificio, creando un patrón de rayas cruzadas en la superficie. Mientras el rectificado interno hace girar la muela dentro del orificio, creando un patrón de estrías paralelas en la superficie.
El objetivo
Si hablamos de los objetivos el bruñido se usa para mejorar la macro geometría del orificio, eliminando las irregularidades, las marcas y las tensiones que se producen por otros procesos. Por su parte, el rectificado interno se usa para mejorar la micro geometría del orificio, eliminando el exceso de material y obteniendo una medida exacta.
El resultado
Finalmente, el bruñido mejora la rugosidad superficial, creando una superficie lisa y brillante que favorece la lubricación y reduce el desgaste y la fricción, mientras el rectificado interno mejora la tolerancia dimensional, creando una superficie precisa y uniforme que garantiza un ajuste perfecto.
Ahora que ya conoces hasta los detalles más pequeños del bruñido, es hora de ponerte en contacto con los expertos de Grumeber si estás buscando resultados con satisfacción garantizada, recibe una cotización por tu proyecto y verás que nuestros precios no tienen competencia en toda Europa.
